A pesar de la poca concentración de materia orgánica en comparación con otros estiércoles, los purines están formados por cantidades significativas de hidratos de carbono, lípidos, aminoácidos y proteínas transformables en metano.
El ganadero, valorizando sus purines energéticamente, obtiene biogás, fertilizante sólido y agua limpia fertilizada apta para riego por goteo, evitando el impacto medioambiental asociado a las emisiones de NH3, N2O y NO2.
FILTRAGAS ha desarrollado un sistema eficiente de pequeñas plantas de autoconsumo de biogás para explotaciones porcinas. En la primera etapa, se realiza la separación sólido-líquida apoyada por coagulación-floculación, obteniendo una fracción sólida con una mayor concentración de materia seca y de nutrientes (NPK) y una fracción líquida con un elevado contenido de materia orgánica soluble, idónea para la biodigestión anaerobia. Esta mayor solubilidad del sustrato influye muy positivamente en la cinética de la reacción debido a su accesibilidad para las enzimas hidrolíticas, ya que un sustrato particulado es, en general, mucho más lentamente hidrolizado que uno disuelto.
El ganadero obtiene un biogás con una capacidad calorífica de 6,0-6,5 kWh/m³ y una composición del 55% de CH4, que le permite cubrir sus necesidades térmicas o eléctricas. Además, obtiene una fracción sólida (digestato y fracción del separador) con un elevado poder fertilizante, lo que resulta en un producto altamente demandado, y agua limpia fertilizada apta para riego por goteo.
El plan regional de biometanización de Castilla-La Mancha (2024-2030) establece un potencial de 8.190 Mm³/año (476 GWh/año) para el sector porcino. Por su parte, la Directiva Europea 2003/87/CE establece que los productores de energía renovable pueden vender los derechos de emisión correspondientes al CO2 ahorrado equivalente en la generación de energía. Este ahorro asciende a 3,2 kg de CO2/m³ de biogás producido.